El departamento del Atlántico tiene un sinnúmero de lugares mágicos, que tenemos a pocas horas para disfrutarlos y darle valor al turismo local.

Uno de estos sitios emblemáticos es Mar del Sol: Caribbean Music Restaurant, ubicado en las playas de Pradomar.

Este restaurante-bar, que es patrimonio cultural del municipio, lleva más de 70 años de sabor salsero y gastronómico, con la mejor oferta de comida de mar.

Artistas salseros, de música africana, deportistas y personalidades, han visitado este sitio, dejando fotografías que perdurarán en la eternidad.

La Gobernadora Elsa Noguera, lo visitó antes de dar inicio a la reapertura de establecimientos comerciales en nuestro departamento. Quedó encantada con el lugar y prometió convertirlo en patrimonio cultural del Atlántico.

Más de 7 décadas

Todo empezó en 1948. Gilberto Ahumada Hernández y su esposa Sixta Tulia González de la Asunción, fundaron este restaurante. Vendían cervezas, gaseosa y pescado frito.

El baranoero y su pareja soñaron en grande y sacaron adelante un negocio netamente familiar.

Después vino la segunda generación conformada por los hermanos Rubén Ahumada, el mayor que ya murió, Roberto Ahumada, Hernán Ahumada y Álvaro Ahumada.

De este último, nacieron Gilberto Ahumada Laskar, Álvaro Ahumada Laskar y Luz Marina Ahumada Laskar. El segundo es 'Cheo', el DJ de hace 25 años de Mar del Sol.

El negocio ha trascendido fronteras. Tiene su página web oficial, con carta digital y una emisora online, con 24 horas de sabor. "Pura salsa, nada de vallenato", expresó 'Cheo' a Zona Cero.

"El negocio es bajo perfil, pero tiene sus cosas de vanguardia. Somos pescadores. Lo que se pesca, se vende, y eso nos da un plus. Comida fresca y con variedad. La gente puede encontrar de todo", agregó Álvaro.

En el negocio tienen una discoteca con 6.500 acetatos. Los venden a Estados Unidos. En la casa, tienen otros 10.000. Son reliquias que valen oro.

Sobrevivieron a la pandemia

El virus del Covid-19 los obligó a cerrar durante 4 meses. Se supieron mantener haciendo domicilios, con pasteles. Se desenvolvieron y gracias a Dios, nunca les faltó nada.

Antes de la reapertura, llamaron a Álvaro de la Gobernación. Le dijeron que Elsa Noguera iba a ir al siguiente día para conocer el sitio, considerado patrimonio cultural.

"Compramos todo los protocolos de bioseguridad. Tenemos lavamanos, señalización de las mesas, Kioscos separados por dos metros. 14 mesas afuera y adentro 16. Máximo 5 personas por mesa, con sonido suave", expresó.

Mar del Sol es un negocio que seguirá pasando de generación a generación.

La Gobernadora le dará un valor mayor cuando lo convierta en patrimonio cultural del Atlántico.

Muchas personalidades han dejado su huella en este lugar, donde el sabor salsero y gastronómico predomina.